Con la ola de calor que está haciendo estos días, lo que más apetecen son recetas fresquitas. Y nos teletransportamos a Francia, con esta receta de helados de Crême Brûlée.
La receta tal cuál, haría más referencia a una crema catalana por el tipo de cocción. Pero me ha apetecido titular así la receta, espero que los más puristas me lo respeten
.
La crême brûlée es muy parecida a la crema catalana, la diferencia está en el tipo de cocción, que se cuece al baño maria dando una textura más suave. A la crema catalana se le añade un espesante como la fécula de maíz.
Este postre, cuya traducción literal del francés es crema quemada, consiste en una crema a base de leche, huevos, azúcar y vainilla y que al final de la cocción se pone azúcar por encima y se quema con una plancha o soplete.
Podéis sustituir la mitad de la nata por leche entera. La leche condensada la podéis sustituir por 80 gr de azúcar, aunque la leche condensada le aporta más cremosidad.
Os invito a prepararla, y que me deis vuestra opinión.
4 paletas
Ingredientes:
- 250 gr de nata 35%
- 25 ml de zumo de lima o limón
- 2 yemas de huevo grandes
- 125 gr de leche condensada
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- Para el caramelo:
- 2 cucharadas de azúcar
Elaboración:
Prepara el caramelo, añadiendo el azúcar en un cazo y a fuego suave. Deja hasta que se funda y se convierta en caramelo. Extiende en un papel de horno. Una vez frío, tritura en un procesador de alimentos, para que quede a trocitos pequeños ( no polvo)
Calienta la nata con la esencia de vainilla.
Mezcla las yemas de huevo con la leche condensada y el zumo de lima.
Retira la leche del fuego y añade la mezcla de yemas sin dejar de batir. Vuelve la mezcla al fuego y cocina a fuego suave durante unos 5 minutos, sin dejar de remover.
Rellena los moldes de helado, coloca el palo. Deja enfriar durante 10 minutos y esparce el caramelo por encima. Introduce en el congelador, un mínimo de 4 horas. O mejor toda la noche.
