Hoy he versionado el Knäckebröd que es un tipo de pan Escandinavo. Muy consumido en Suecia. Originariamente se elabora con harina de centeno. Pero como yo soy una enamorada de la harina de trigo Sarraceno y de la avena, he hecho una mezcla. ¡Y el resultado ha sido maravilloso!
Es una receta facilísima que la podéis hacer con niños. Los intolerantes al gluten la podéis hacer sustituyendo la cantidad de harina de centeno por la de trigo sarraceno.
Ingredientes:
- 100 gr de harina integral de trigo Sarraceno
- 50 gr de harina de centeno o espelta integral
- 50 gr de harina de avena ( yo la trituro en el molinillo de café)
- 3/4 de cucharadita de sal maldon
- 150 gr de semillas variadas ( pipas de calabaza, sésamo negro, sésamo dorado, semillas de amapola, pipas de girasol )
- 20 gr más de la mezcla de semillas
- Media cucharadita de comino en polvo
- 2 cucharaditas de semillas de hinojo( opcional) si no os gusta podéis prescindir
- 50 ml de aceite de oliva
- De 140 a 150 de agua templada
Instrucciones:
- Precalentamos el horno a 180°
- Forramos una bandeja de horno con papel vegetal.
- Ponemos las harinas, las semillas,la sal, el comino, las semillas de hinojo y mezclamos bien en un recipiente amplio.
- Le añadimos el aceite y el agua templada mezclando con las manos hasta conseguir que quede bien unido.
- Ponemos la masa en un papel vegetal y le colocamos otro papel vegetal encima. Estiramos la masa con el rodillo dejando un grueso de medio centímetro.
- Quitamos el papel y esparcimos los 20 gr de semillas restantes por encima. Pasamos ligeramente el rodillo por encima para que las semillas se adhieran bien.
- Con un cuchillo largo marcamos los rectángulos del tamaño que deseéis, pero sin llegar a cortarlo del todo.
- Horneamos a 180° durante unos 20 minutos, tienen que quedar un poquito doradas para que queden más crujientes, pero sin que se lleguen a quemar.
- Sacamos del horno y dejamos que enfríen. Con el cuchillo acabamos de cortarlas.
- Las podemos conservar en una lata o dentro de una bolsa de celofán.